PSICOLOGÍA
BIENESTAR
Cumplir nuestros sueños
Todos tenemos sueños y un montón de propósitos que sabemos que lográndolos, nuestra vida será más plena y seremos más felices. Lo que a menudo olvidamos es que las herramientas para encaminarnos hacia esos sueños y propósitos las tenemos nosotros y podemos llegar hasta ellas desde el autoconocimiento, sanación emocional, equilibrio y consciencia. ¿Me dejas ayudarte?
Servicio de
acompañamiento
Trabajarás tu
autoconocimiento
Conocerte mejor a ti misma
Decía William Shakespeare: "De todos los conocimientos posibles, el más sabio y útil es conocerse a sí mismo” Puede que creas saber todo sobre ti, pero ¿cuánto tiempo dedicas a la introspección?, ¿cada cuánto te detienes a reflexionar y enfocarte en tus metas?, ¿sabes en todo momento lo que tu cuerpo intenta decirte?
Conocerás tus
emociones
Mejorar tu bienestar emocional
Muchas veces no sabemos muy bien cómo nos sentimos o qué hacer con las emociones que estamos experimentando. Y esto es porque, sencilamente, no nos han dado las herramientas para ello. Desde pequeños nos enseñan a leer, a escribir, historia, matemáticas... pero no a gestionar nuestras emociones.
Aprederás a estar
en equilibrio
Reducir estrés y ansiedad
Cuando hablamos de tener equilibrio en nuestra vida hablamos de dar y recibir, mantener y dejar ir, escuchar y expresarnos... Seguro que has sentido que das mucho más de lo que recibes, o que te cuesta alejarte de personas o ambientes tóxicos. Cuando no hay balance en nuestra vida, dejamos una puerta abierta a estrés y la ansiedad.
Desarrollarás
tu consciencia
Te sentirás plena y feliz
Mediante técnicas de mindfulness conseguirás vivir con tu mente en el presente y ver la vida desde la compasión, con la mente abierta y sin juzgar. Con estas herramientas verás que poco a poco el estrés y la ansiedad se van, dejandote ser esa versión de ti misma que siempre has soñado ser.
Cuánto sabes sobre ti y lo que tu cuerpo te dice?
- Sientes que debes hacer cambios en tu vida y no sabes por donde empezar
- Sientes que no disfrutas plenamente de tu trabajo o tus relaciones
- Sientes que tus días son todos iguales y nada te ilusiona
- Sientes que tu creatividad está dormida o incluso crees que no la tienes