Cómo muchos de ustedes, luego de 3 hijos he batallado con mi peso y no fue hasta a mediados del año pasado que comencé a dejar de quejarme y ponerme en acción para poder bajar esos kilitos que no me tenían tan contenta. Claro que cada año me planteaba bajar de peso y cometía un montón de errores, que creo la mayoría cometemos a la hora de querer obtener resultados de una manera rápida, pero he comprendido con el paso del tiempo, que la perdida de peso y el estar en forma debe ser un estilo de vida, que incluya hábitos e intereses coherentes.
En este proceso y cómo lo he mencionado antes, están involucrados un sinfín de factores psicológicos, que son en parte la razón de esos kilitos de más. Pero la satisfacción de estar bien contigo mismo, es algo que no tiene precio, así que me gustaría contarte mis descubrimientos en el proceso y qué como yo, te comprometas contigo en relación a ser tu mejor versión. Comencemos:
- CADA ORGANISMO ES DIFERENTE: por ello es necesario acercarte a un profesional que te pueda guiar en cuanto a una buena dieta, pues no es lo mismo tener como meta bajar 10 kilos, que 25. Además tus gustos, estilo de vida, tiempos, entre otros factores deberán ser tomados en cuenta para tu dieta ideal.
- ADIOS A LAS DIETAS MAGICAS: Debemos buscar tomar un régimen alimenticio que se amolde a nuestra meta, pero que a su vez sea sostenible en el tiempo. De nada te sirve bajar rápidamente 5 o 10 kilos, si en cuanto sientes que ya estas bajando comienzas a relajarte y el rebote te asecha. Tu organismo como tu mente necesita estabilidad, y un conjunto de hábitos alimenticios que, si bien de inicio te lleven a bajar la grasa y luego a mantenerte en tu peso ideal, cuidando siempre tu salud.
- EL CAMBIO DE HÁBITOS ALIMENTICIOS ALTERA TU ESTADO HORMONAL: Es preciso saberlo, pues es un cambio que afecta directamente el sistema endocrino, liberándose enzimas y hormonas, que afectan tu estado de ánimo, tu apetito, la saciedad, etc. de ahí la importancia de conocernos y estar atentos a lo que sentimos, sin hacer cambios tan drásticos que nos alteren demás innecesariamente.
- ELIMINA ALIMENTOS FRITOS: Para bajar de peso es necesario consumir menos calorías de las que nuestro cuerpo requiere, para que busque obtener la energía por parte de nuestra grasa corporal. Al consumir alimentos fritos, absorbemos una cantidad de calorías innecesariamente. Para que te des una idea, las papas fritas, por ejemplo, aportan 5 veces más calorías de las que tiene una papa cocida, y contemplarlo de esta manera nos hace ser conscientes de evaluar los alimentos que podemos evitar, pues ni nos nutren, ni nos dejan cumplir nuestra meta.
- EL ARTE DE COMER, TAMBIÉN NOS GENERA PLACER: Y aquí se hacen presentes nuestras emociones. Muchas veces el comer está asociado con una alternativa rápida de mejorar el ánimo, llenar vacíos emocionales, etc. llegando a convertirse en un proceso menos fisiológico y más psicológico. Aprender a reconocer cuando estamos comiendo sin tener realmente hambre, además de buscar manejar nuestras emociones con hábitos más saludables como hacer ejercicio, practicar un hobby, relacionarse con otras personas, crear un entorno más positivo será una meta adicional que te ayudará en este camino.
- AUMENTAR LA ACTIVIDAD FÍSICA Y HACER EJERCICIOS DE FUERZA: La mayoría creemos que, para bajar de peso, es recomendable hacer cardio, pero me he encontrado con que, al hacer puro cardio, si bajamos de peso, pero esta disminución de kilos involucra por un lado la grasa que deseamos eliminar, pero también la masa muscular que deseamos conservar. Así que, al hacer ejercicio de fuerza, estimulamos a nuestro organismo en mantener la masa muscular, y como respuesta a ese estímulo se generan muchas respuestas positivas en nuestro cuerpo, además de tomar la energía de la grasa a la que queremos decirle bye.
- LA ALIMENTACIÓN ABARCA UN 80% Y EL EJERCICIO UN 20% EN EL ÉXITO DE TU FIGURA IDEAL: No por ello una cosa es menos importante que la otra. Para llegar al peso que quieres, si solo incluyes en tus hábitos un régimen alimenticio saludable y de acuerdo a lo que deseas lograr, serás vulnerable a tener rebotes o perdida de la masa muscular, si no lo acompañas de ejercicio. Además, está comprobado que el ejercicio aporta la estimulación de las hormonas que te llevan a sentirte feliz, activa, energética y proactiva. Vale la pena incluir ambos hábitos a nuestro estilo de vida. El cuidar tu dieta y hacer ejercicio garantiza no solo bajar de peso, sino estar mejor anímicamente, sentirte motivada y comprometida.
Creo en mi experiencia, este es el inicio de un estilo de vida saludable, acompañado de patrones de pensamiento y acciones más positivos. Sé lo frustrante que es no tener esa figura o peso que deseamos, pero en muchas ocasiones nos ciclamos en quejarnos y hacer muy poco por lo que queremos. Recuerdo con claridad una imagen de una mujer atlética y guapa que caminaba por la calle, mientras otras la observaban y criticaban, pensando en como era injusta la vida porque a ella la genética la ayudaba. Más al analizar de cerca la rutina de la mujer, tenía un estilo de vida saludable, con hábitos similares a los que te comento, haciendo lo necesario para estar en forma. Y claro, para las demás era más fácil juzgar y justificar el hecho de que la genética era la responsable.
Los resultados deseados solo están al alcance de aquello que están dispuestos a hacer lo necesario. ¡¡Así que Vamos!!
